De acuerdo a nuestra experiencia compartimos algunos cambios que se vendrán después del COVID-19
Hemos tenido la experiencia de trabajar con el sector educativo universitario en Colombia desde el año 2009, durante estos once años lo hemos visto crecer de una manera rápida e incluso se puede decir que en algunos segmentos descontrolada y no siempre con la mejor calidad.
Las Universidades en el país tienen diversos niveles, enfoques, instalaciones, etc., y bien es sabido que durante los últimos diez años el sector ha tenido un gran desempeño en aquellas universidades que se han preocupado por la calidad académica y la exigencia, como también ha tenido una proliferación de entidades de dudosa reputación y calidad.
En un país donde ha sido tradición obtener un grado universitario para poder escalar económica y socialmente, y donde escasean las entidades de formación tecnológica de buen nivel, lograr acceder a una buena universidad es una opción que no es fácil para muchos, con esfuerzo muchos estudiantes y sus familias logran mantener esto hasta terminar, la deserción antes del COVID19 se situaba por encima del 40%.
La preocupación ahora en esta época pandémica es de todos, de los estudiantes, de sus padres, y de las universidades, por razones que aún no encontramos del todo muy claras, muchas de ellas se lanzaron a construir sofisticadas instalaciones, salones muy bien dotados, espacios abiertos con muy buen diseño, amplias cafeterías, todo un modelo de “campus” al mejor estilo americano o europeo, algunas adquirieron nuevas tierras, y otras remodelaron zonas del centro de la ciudad, las matriculas también se “actualizaron”, todo esto al parecer sin conocer el entorno económico y social del país, parecía que iban a encontrase estudiantes nuevos para todo y para todos, alguien les había dicho, y le creyeron que todo saldría bien.
Ya desde 2018 se anunciaban “vientos fuertes y mal clima” la matricula venia frenada, algunas carreras no lograban el mínimo requerido de estudiantes, esto unido al costo de mantener una plantilla amplia y bien formada de profesores y decanos y un cuerpo administrativo grande y necesario, y como si las cosas ya no fueran complicadas terminó mal el 2019 en casi todas, y llego el COVID19 apenas comenzaba el semestre de 2020, y la cosa se complicó a un nivel no esperado.
Los estudios de consultores internacionales ya decían desde el 2005 que la educación seria uno de los cinco sectores que tendrían grandes cambios en los próximos 10 y 15 años, GARTNER Group en 2010 hablaba de la “virtualización”, de la educación por demanda, y apareció CURSERA y otras, pero esto no fue visto como una gran amenaza, incluso recuerdo hace un par de años en un centro académico, una amiga directiva universitaria me decía “los papás buscan siempre un cartón de un sitio conocido”, mi argumento era el contrario, las nuevas generaciones buscan aprender lo que necesitan, y lo quieren hacer en tiempos cortos y a costos razonables y conseguir empleo, no esperar a que en cinco o seis años les den un cartón para salir a no encontrar trabajo.
Hoy se espera que la educación formal universitaria tenga un descenso en la matricula del 20 al 35%, los post grados tendrán una caída del 40%, que organizaciones como CURSERA, y ahora la “Universidad de LINKEDIN” que está por salir con sus programas en más de 15 idiomas tengan un crecimiento muy alto, en los próximos cinco años, más del 25% de los estudiantes ya no irán a una universidad formal, otra variable será que el curso de especialización o maestría estará entre los $ 2000 a $ 3500 dólares y será virtual y lo podrán tomar con HARVARD, YALE, OXFORD, etc., sin mencionar que los competidores vendrán de todo el planeta.
También la oferta ya no será solo por semestres y con un orden obligado de materias y créditos, si no por módulos y sin límites de horarios ni tiempo, y habrá que ver cuáles son los costos de los programas, y si se pueden ofrecer a todo el mundo, o al menos regionalmente, el TEC de Monterrey en México, o la Universidad de Campiñas en Brasil ya van muy adelante¨, dejaron de construir edificios para construir plataformas de conocimiento.
Desde luego quienes están mejor posicionados hoy, son aquellos centros de estudio que han construido durante años nombre, calidad y confianza en su producto educativo, ahora tendrán que acelerar las alianzas con los creadores de producto para la educación virtual, porque no se trata de pasar el contenido actual a PowerPoint o el de buscar que las conferencias sean el método para aprender, esto tiene sus diferencias, la audiencia también necesita aprender a disciplinarse, hasta el momento no son del todo satisfactorios los datos de quienes han tenido que pasar a estudiar mediante aplicaciones como ZOOM o TEAM y otras, el cambio de cultura no será fácil, y a los profesores también les tocara reinventar su forma de trabajar con sus alumnos.
Otro tema es la conectividad, El país necesita mucha mayor y mejor conectividad, y eso no es solo colocar un par de puestos de internet en las plazas de los pequeños municipios, se necesita capacidad y velocidad, y en palabras sencillas, inversión y visión, en las regiones apartadas y en las cercanas a las grandes ciudades tenemos muchas dificultades, los estudiantes pocos tienen computador y mucho menos “tabletas”, sus hogares carecen de conexión a internet, y estudiar usando el plan de datos de un celular no solo es costoso si no ineficiente.
Las escuelas, necesitan instalaciones y equipos modernos, Malasia hace 30 años comenzó y hoy está dentro de los primeros cinco países del mundo en conectividad, dejemos de compararnos hacia abajo y miremos hacia arriba, nos falta mucho. Tenemos que crear un sistema financiero que mire al sector a largo plazo, que se financie a la educación a 10 y 15 años, que se puedan pagar las matriculas, que las buenas universidades sean muchas, y que las opciones sean más, ojala se logre transformar el SENA hoy ya no es lo que se necesita, es más un elefante blanco que una ágil gacela, necesita poder llegar a las regiones y a las poblaciones, de nada sirve estar en las grandes ciudades, y además la red debe poder llegar a los hogares de muchos muchachos en zonas campesinas.
Esperemos que también el Ministerio de Educación comprenda la urgencia de lo que significa este cambio; y que no salgan a decir como lo hizo en finales del siglo pasado un Presidente de empresa del sector turístico “que el Congreso y el Ministerio no van a permitir que internet regule el transporte aéreo”… sobra decir que el mercado se impuso y hoy ya sabemos en que terminaron las agencias de viajes y las comisiones de los pasajes aéreos, porque será el mercado el que defina que, como y de donde se puede aprender, y las Universidades y Centros de estudio tienen la obligación casi inmediata de revisar el modelo, los costos, y sus alianzas para ofrecer lo que el nuevo mundo POST-COVID les va a exigir.
Para terminar, Mi hijo recibió en días pasados una foto que parece ser el augurio de lo que viene, era un gran búho, posado en una silla de un salón de clases de la universidad observando a la nada.
Felipe Andrade
Gerente
Junio 01 de 2020
*Estrategia Humana Ltda., es socia de HTT-Latam representante de SHL para algunos países de la región.
¿Tiene alguna pregunta?,
Déjenos asesorarlo y hacer de su empresa, una empresa con estrategia humana.